sábado, 6 de septiembre de 2008

Orión, refulgente cazador del firmamento




Autor: Tassilon-Stavros


Palimpsesto Alejandrino






++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++

ORIÓN, REFULGENTE CAZADOR DEL

FIRMAMENTO



++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++



Guirnalda para el mancebo. Huracán del bosque. Titán cazador. De Artemisa arco de jerarquía.

Mano poderosa y fuerza infatigable. Sereno cuerpo. Halcón prudente que a su séquito se rendía.


Infinito lazo deleitable. Hijo heroico de los prados. Orión, cántico destellante del mensaje divino.

Oleajes del Egeo. Mar coronado por sus hombros de coloso. Hijo exaltado de un nuevo himno.


En poseerle Artemisa se glorifica. Forma y gozo en toda la tierra suya. Sangre y carne de realeza.

Mas, ¡ay, pozo de niebla!, en su loor, Orión vanidad arrastra. Loa que al titán arrebata su belleza.



Junto al río, llenan las doncellas su ánforas. Y el cazador, cabello de acanto de oro, allí se jacta.

Risa de lisonjas. Mofa de la Tierra. Orión se envanece. "¡Ni a monstruos temo, ni uno me basta!"


Gea, madre tierna y afanosa. Eternizada gloria entre montes y selvas. Ahora sima de humillación.

¡Ah, cohorte cazadora!, senda de orgullo, hilada orla del desafío. "Yo Anegaré tus sueños, Orión"


Paisaje idílico. Gea gobierna. Yergue su cabeza el gigante predestinado, que en campeón se erige.

"Tu reto ofende mi plétora" Y en la ufana sangre del titán, al escorpión ponzoña de muerte exige.


Lloro de Artemisa. "¡Ay!, bosque de castigo, tumba fosca. Mancebo que en mi culto se complacía"

"Zeus, detén tu carroza" De nardo la mirada. Ruego devoto de diosa, que el ígneo ocaso recogía.


Simiente de titán. Arquero de ciervos y corzos. Siervo loado. Por el conjuro de Gea extinguido.

Ahora don del cielo. Orión, joyel cegador del universo. Altar plateado. Culto por Zeus bendecido.